El pasado fin de semana estuvimos en el Multiusos del Sar,pero no fuimos a ver un partido del Santiago Futsal o a animar al Obradoiro, si no que fuimos a prácticar un deporte de riesgo: alpinismo.

Hablando algo más en serio: el sábado fuimos a trabajar al Pabellón del Sar, en Santiago de Compostela, concretamente a sustituir las lonas de un sistema enrollable motorizado ya instalado en su día por nuestra empresa. Estas lonas tenían un total de 7 metros de ancho y 3,50 de alto (eran dos lonas de 3,50 x 3,50 cada una) y estaban impresas en lona opaca a doble cara. Lo peculiar del asunto fue la altura a la que se trabajó.

Es importante mencionar, que si tuvimos ocasión de acometer este reto fue gracias a la confianza que depositó en nosotros Don Clic y que, entre otras cosas, se dedica a la gestión integral de publicidad para empresas y organizaciones.

Os dejamos una buena colección de fotografías para que podais ver el proceso de instalación, con todas las medidas de seguridad que la ocasión requería y el trabajo terminado, con la imagen de Dimonorte, el concesionario Peugeot del Milladoiro que generosamente patrocina al equipo del Obradoiro CAB Río Natura Monbus.

Para el grupo logístico Hertrans hemos confeccionado dos laterales tipo corredera, rotulados con su imagen corporativa. También nos hemos encargado de rotular la puerta trasera con vinilo de corte adhesivo.

El resultado se aprecia bien en la foto que publicamos sobre esta líneas.

Cuando realices una reforma en tu casa, piensa en TGM para detalles en impresión digital. Esto es lo que pensado nuestro cliente doscerezas para reformar los muebles de esta habitación y darle una nueva función.

Por ello, ha combinado el armario, la mesa y unas estanterías que ha retirado del salón para darle una nueva imagen.

Lo que se ha hecho es recubrir partes de los muebles, después de reformarlos, de vinilo adhesivo impreso en digital, personalizado y a medida. Aquí os dejamos unas imágenes del cambio:

-la mesa:

-el armario:

-la estantería:

Realmente fantástico, ¡no creéis!