Es cada vez más habitual que utilicemos un toldo cortina como si fuese un faldón lateral, por su resistencia y comodidad, puesto que no tenemos que recogerlo y colocarlo cada día, sino que al enrollarlo el espacio queda libre de cualquier obstáculo.
En la instalación que vemos en la imagen, se ha colocado uno a cada lado del toldo, y se ha confeccionado con ventana en plástico transparente para dejar pasar la luz y que el espacio que protege sea más visible y no dé sensación de cerrado.